Hasta la fecha, la estufa de gas es el calentador más eficiente y económico para calentar la casa. La combustión de gas, que es la base de cualquier estufa, proporciona una energía más económica y eficiente que cualquier otro dispositivo de calefacción. Pero, ¿es seguro utilizar este tipo de calor en nuestros hogares? Lo cierto es que todavía son muchas las personas que tienen dudas e inquietudes sobre la seguridad del uso de estufas de gas. La mayoría de estas preocupaciones son infundadas, pero al mismo tiempo el uso de calentadores de gas requiere el cumplimiento de las normas de seguridad.

Principio básico

La mayoría de las estufas de gas se basan en dos principios básicos: un quemador y un encendedor. Los quemadores son similares a los que se usan en las bombillas incandescentes: cuando se les aplica calor, comienzan a brillar. En una estufa, sin embargo, la llama no produce luz visible; produce calor para calentar la habitación.

Una estufa de gas puede quemar combustibles naturales como gas para cocinar o queroseno, o gas licuado de petróleo (GLP). Un quemador típico utiliza un sistema de mecha, piloto y llama principal para encender la estufa. El aire necesario para la combustión se toma del exterior y se calienta mediante el proceso de combustión dentro de la cámara de combustión.

Diferencias entre cocinas de gas y eléctricas.

Las estufas de gas producen vapor, por lo que el agua puede condensarse en paredes y techos, y también en las ventanas. Las estufas eléctricas no emiten este vapor, sino que generan calor seco sin combustión. Si las paredes están húmedas, no es consecuencia de la calefacción.

Otra diferencia significativa se relaciona con la forma en que cada una de las estufas libera calor. Las estufas eléctricas lo hacen por radiación, es decir, el calor se propaga a medida que sube el aire alrededor de la estufa. Las estufas de gas emiten humo directo, que también calienta el aire, pero más rápidamente que las estufas eléctricas.

Revisar todas las conexiones

Este paso es necesario para encender correctamente una estufa de gas. Lo primero que debes hacer es revisar su instalación, ya que no debe quedar ninguna pieza suelta y mucho menos con algún tipo de fuga que ponga en peligro a las personas que lo rodean.

Después de esto, dirija la inspección de las conexiones de la estufa una por una: la manguera, el cepillo, los cilindros, la bomba, el quemador y las válvulas. Debes ser lo más minucioso posible en esta revisión, para evitar fugas de gas o accidentes inesperados.

Recomendaciones de seguridad para usar una estufa de gas

Imagen tomada de Rakuten

Una vez que sabes cómo funciona una estufa de gas, hay que tener en cuenta ciertas recomendaciones de seguridad. para evitar problemas de salud y seguridad y disfrutar del calor que nos dan estos aparatos de calefacción.

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Jorge Renteiro

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